Ir al contenido principal

Bitácora Liniera. Sábado 15.01.2011.

Sábado 15.01.2011. 1:02 pm. Estoy en Guayubin, un poblado cerca de Las Matas de Santa Cruz. Estamos en otra construcción con un grupo de avance, vinimos 3 del grupo 1 y los estoy acompañando. Hoy estamos trabajando con las vigas y las columnas. Es un pueblo limpio, no tan pequeño y me gusta porque es bonito. Acabamos de comer en casa de uno de los amigos. Muy buena comida y muy buena compañía. Ahora la sensación del grupo es el último álbum de Black Eyed Peas, The Begining, porque no lo habían oído completo, entonces lo puse y estamos quemando las canciones para variar.

Cuando veníamos de camino pasamos por una cosecha inmensa de algo que pregunte: “¿y son piñas?” –Nop, respondieron. “Es sábila”. Y lo único que dije en mi ignorancia del tema: “Y pa’ que tanta sábila si aquí uno ni usa eso casi nunca, eso lo que tiene un bajito”. Así que me explicaron que se exporta. De manera que supe que no solo es para que gente ponga su sábila en el marco de la puerta guindando (costumbre rara esa y sin base). Es la plantación más grande del país, no, de América latina, interesante dato, así que le tome algunas fotos. Más adelante pasamos por una zona franca especial, donde le quitan la cascara y la procesan, solo para sábila.

Ayer trabaje en el área verde del local, donde se hará un jardín en los laterales, estábamos nivelando el terreno con tierra negra, todavía no puedo conducir el John Deere (la pala mecánica). Ayer me dieron animo porque ya estaba al tirar la toalla, cansado. Me dijo la esposa de uno de los dirigentes: “Te notas algo agotado” y le dije “le miento si le digo que no, porque SI”, así que me dijo que es normal la primera semana, y la segunda. Pero después uno se acostumbra, “lo que no se puede hacer es cederse”, me dijo, “si te cedes, la mente se convencerá de que no das para mas y ahí está el problema”. Creo que esas palabras no las olvidare nunca, aplican no solo en trabajos físicos, sino en cada uno de los aspectos de la vida. Tuve un grandísimo privilegio luego de comida y un muy buen provecho.

Cuando dieron las 5 pm y llegue a la casa lo primero que hice fue sacar el 150 (el Cross jeje) y dije que no necesitaba ayuda ni para encenderlo ni para darle pa’lante. Así fue, lo único que uno de los panas lo encendió para dar una vueltecita sacando tierra y “guayando el área”. Me lo dio y le di con to’ pa’lante, aprendí a usar los cambios bien, con el cloche (se escribe así en español) y me fui a varios kilómetros sintiendo como se me estrellaban en la cara los mosquitos, así que puse ojitos de chinito. No se sentían los hoyos de la calle a esa velocidad que iba. Solo pensé: “ cuando con uno como este coja pa’ Constanza a subir lomas!!”

Luego fuimos a visitar a uno de los encargados del proyecto y ahí pasamos un rato, luego a casa donde se hospedan 4 de los muchachos, ahí tienen internet así que aproveche y subí la primera parte de esta bitácora. En la noche terminamos de ver una película y Nite Nite.

Antes de ayer trabaje en parqueo, ya estaba haciendo la mezcla en el trompo solo, también los  bumpers. Nivelamos la grava del parqueo completa, bastante trabajo relativamente. El parqueo ha quedado listo y todo en su lugar. La verdad no es un trabajo difícil, pero si inteligente. De regreso a casa otra de las ocurrencias de quien conduce la camioneta fue algo así como: “Oye pero ¿y cómo e’ que tu manejas men?” –Dice uno. Entonces el coje y pone la camioneta en 2da y se desmonta diciendo:  “Buen freco, maneje usted entonce’ que yo llego caminando” Jejeje yo abri los ojos vociandole al bendito loco que venga a montarse y que sea mas sano de mente. De alla pa’ ca viene el muerto de risa, y nosotros explotados de risa porque habían unos muchachitos viendo el show más adelante y estaban con los ojasos mirando y diciendo: “Heeeeeyyy que vacanoooo!!!! Hazlo de nuevo!!!” La verdad es que me hace eso en una avioneta o algo así y me tiro atrás de el. Llegamos a la casa y luego de una reunión, fuimos a la heladería, a la casa y eso fue todo por el día. NITE.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Si hay ganas, hay tiempo.

Hoy lei una frase que me puso a pensar un poco, ya les cuento como llegué a la conclusión de volver a escribir algo, así como lo que me paso por la mente al leer eso.  Primero, estoy actualmente en New York y ya tengo un promedio de tres semanas aquí. Vine a complementar unos negocios de mi pasatiempo que se convirtió en mi trabajo hace más de 2 años ya. Resulta que lo que hacia en mi tiempo libre con el tiempo resultó ser mi mayor fuente de ingresos, por lo que decidí darle más carácter y dedicarme solo a esto. No se siente como trabajo cuando es algo que te gusta, como a mi el hecho de tratar con mascotas y llevar esa felicidad a casa de las personas. Ha sido todo un éxito, más por lo bien que me siento. En fin, como tenia tantos clientes que me pedían desde USA decidí venir a explorar ese mercado aquí y pues, ¡valla sorpresa! Muchas cosas nuevas he aprendido y creo que mi misión cumplió su objetivo.  Desde el Instagram del negocio vi la frase de un cliente que leía así: &qu

Aprender a dejar ir alguien que amas.

Un pequeño escrito sobre lo que según mi opinión se debe hacer en casos de arraigamiento intenso con esas personas que nos hacen daño, que nos restan o que sencillamente no contribuyen nada positivo a nosotros. También en el caso de muchos esos amores que son dañinos, ya sea por la mala relación que se tiene (peleas continuas), desconfianza extrema, diferencias personales y otras situaciones. Atento a esto si estas en alguna de esas situaciones y promete a ti mismo que harás algo al respecto. Cuando algo que se debe terminar, dejar o simplemente dar la vuelta y abandonar se debe tener el corazón de hierro, se debe hacer un esfuerzo mayor. Sabes porque... es que estamos acostumbrados a esa persona, le tenemos cariño y estamos muchas veces "ciegos" por tanto amor que le tenemos. El problema reside en que cuando eso pasa, la otra persona se toma una libertad que no le corresponde: hacer cosas que nos perjudican o que sencillamente estamos cansados soportar. Esa libertad s

La suma de todos los miedos

    El paso del tiempo es un aliado letal, que favorece nuestras expectativas o las destruye, solo depende de nuestra percepción. Un grato recuerdo de los momentos difíciles puede ayudarnos a confiar en que todo saldrá bien, pues nadie muere de penas o resiliencia. Nuestro paso por el mundo nos pone en situaciones que son del tamaño de nuestra imaginación y de vez en cuando hacen sentido en que son una barbaridad. Aún así existen marcadores somáticos que necesitan ser trabajados en nuestra conciencia para lograr lo que nunca nos imaginamos. Dicen que la genética marca nuestra conducta, pero creo firmemente en los estudios que avalan que la epigenética influye mucho más. Esto se refiere al hecho de que el ambiente donde nos encontramos define en mayor parte nuestra conducta y la forma de ver las cosas. Nunca tendremos un punto de vista universal de todo, siempre estaremos limitados al poco conocimiento que hemos adquirido y las cosas que nos han sucedido en el tiempo. Sin embargo, podem